HENRI MATISSE ***
Henri Matisse
Pintor francés, máximo representante del fauvismo*, nace en Catea Cambrésis, (Le Cateau-Cambrésis es una población y comuna francesa, en la región de Norte-Paso de Calais, departamento de Norte, en el distrito de Cambrai y cantón de Le Cateau-Cambrésis, el año 1869 - muere en Niza, el año 1954. *Generalmente es caracterizado por un empleo provocativo del color.
El 20 de marzo de 1906 se inauguraba en los grandes invernaderos de Cours-la-Reine, en París, una nueva edición del Salón de la Sociedad de Artistas Independientes. Aquella exposición significó el primer gran éxito de Matisse y su consagración como pintor y como cabeza visible de un nuevo movimiento.
Los lienzos del artista causaron sensación: de gesto espontáneo y color puro, su obra daba las pautas de un estilo nuevo, lleno de vigor expresivo y que se negaba a ser una mera imitación de la naturaleza. Destacaba entre sus pinturas la ensoñación simbolista Lujo, calma y voluptuosidad, cuadro adquirido por el también pintor francés Paul Signac, y cuyas gruesas y cortas pinceladas de intenso color recuerdan precisamente la técnica divisionista propia del mismo Signac; la tela estaba inspirada en los cuadros del que había sido uno de los maestros de Matisse, Gustave Moreau.
Henri Matisse cursó estudios de jurisprudencia entre 1887 y 1888 en la Universidad de París, que se vieron interrumpidos por una larga y grave enfermedad que lo retuvo en cama hacia 1890. Durante su convalecencia empezó a pintar, y en 1891, ya recuperado, venció la oposición de sus padres y abandonó la carrera de leyes para entrar en la Escuela Julian, donde se formó bajo la dirección de Bouguereau.
En 1898 viajó a Londres, animado por Camille Pissarro, y descubrió la obra de Joseph Turner. Su obra Madame Matisse (también llamada Retrato de la raya verde) causó, a pesar de sus reducidas dimensiones, un gran impacto en el Salón de 1905 por la sabia saturación de los colores chillones. Matisse utilizó aquí el color en todas sus posibilidades expresivas. En 1907, por medio de Gertrude Stein, conoció al español Pablo Picasso y realizó su primer viaje a Italia.
En 1908, ilusionado por transmitir sus ideas a los artistas más jóvenes, abrió una academia que sólo mantendría hasta 1911 y realizó su primera exposición individual en Nueva York, en la galería de Alfred Stieglitz. También en 1908 pintó su famosa obra Armonía en rojo. También conocido como Mesa de postres, Mesa servida o La habitación roja, el lienzo presenta un comedor burgués con una mesa en la que una camarera ultima los detalles previos de un ágape. El pintor ya había realizado una obra sobre el mismo tema una década antes, pero con resultados muy diferentes.
Alejada de composiciones convencionales, Armonía en rojo, que debe su título al color imperante en la escena, ofrece un aspecto más cercano al decorativismo de los tapices. El interés por la perspectiva y la sensación de realidad han dado paso a una imagen plana, colmada de arabescos orientalizantes; el interior está decorado con un arabesco que se refleja en las formas del paisaje visto a través de la ventana. Sin embargo, la mesa (que se confunde al fusionarse cromáticamente con la pared) conserva los mismos fruteros e idénticas botellas de obras anteriores. Esta escena doméstica, alegremente intimista, es uno de los iconos más difundidos del fauvismo.
En 1909 recibe del coleccionista ruso Schukin el encargo de pintar dos grandes paneles: La danza y La música. Las fuentes de este mural son variadas, desde las figuras de los vasos griegos a las imágenes greco-romanas de las Tres Gracias. Los colores puros y llamativos de tonos oscuros cubren las zonas nítida-mente dibujadas, aspecto este último que Matisse toma de la pintura de Cézanne.
La composición posee un ritmo vivo, al servicio del cual se han deformado artificiosamente las figuras, se ha sacrificado la descripción espacial y se han reducido a tres los colores presentes. Los cinco personajes representados forman, según Matisse, "un corro que parece volar sobre la colina", mientras bailan una danza provenzal. La versión definitiva de La danza (realizada al año siguiente, en 1910) presenta una viveza cromática muy superior a la de la primera versión.
En 1925 realiza un nuevo viaje a Italia; su estilo se hace mas robusto, como muestra Figura decorativa sobre un fondo ornamental (1926), que es considerada la obra culminante de la preocupación de Matisse por el desnudo en un decorado oriental: la figura se presenta esquemática y monumental. Por esos años su prestigio y su éxito eran ya universales: en 1927 obtuvo el premio del Carnegie International de Pittsburg, vendió prácticamente todos los cuadros de su exposición en la Dudensing Gallery en Nueva York, y entre 1929 y 1933 se organizaron exposiciones retrospectivas de su obra en Berlín, Basilea, Nueva York y París. Data de estos años Odalisca con pantalones grises, donde retoma la temática orientalista fuera del lugar de origen, en el estudio de París.
Al finalizar la Segunda Guerra Mundial, expuso con Picasso en el Victoria and Albert Museum de Londres; después presentó una gran retrospectiva en el Salón de Otoño de París. Entre 1948 y 1950 trabajó en la decoración de la Capilla del Rosario de Vence (donde residía desde 1944). La obra más ambiciosa hecha con papeles recortados es La piscina (1952), donde las figuras están distorsionadas para crear el efecto de hallarse bajo el agua.
En los últimos años de su vida, que pasó en Niza, los reconocimientos a su trabajo fueron incesantes: el Museo de Lucerna organiza su primera gran exposición antológica, con más de trescientas obras; recibe el premio de la Bienal de Venecia (1950); se inaugura una retrospectiva en el Museo Nacional de Tokio (1951) y en el Museo de Arte de San Francisco (1952), y se abre un museo dedicado a su obra en su ciudad natal. Murió el 03 de Noviembre de 1954 en Niza, a la edad de ochenta y cinco años.
Aunque Matisse sea conocido fundamentalmente como pintor, fue también un excelente escultor y dibujante. Su posición histórica como iniciador del Fauvismo no debe oscurecer sus logros personales al margen de un movimiento que, en realidad, duró poco y no tuvo programa. Su rival en magnitud e influencia fue Picasso, con quien mantuvo una distanciada relación de amistad y respeto durante muchos años. Los temas principales de su pintura fueron la naturaleza muerta, el paisaje, el desnudo femenino y su propio entorno (el estudio).Biografías y Vidas, Ruiza, M., Fernández, T. y Tamaro, E. (2004)
!HONOR, A QUIEN HONOR MERECE!
!HONOR, A QUIEN HONOR MERECE!
Comentarios
Publicar un comentario