PADRE PÍO DE PIETRACELINA

BIOGRAFÍA DEL PADRE PÍO DE PIETRACELINA

ESCRIBE: EGLY COLINA MARÍN

Nacido en Italia, del matrimonio conformado por Grazio  Forgione y María Giuseppa Di Nunzio en un pequeño pueblo de Benevento, el 25 de mayo de 1887, hogar humilde en donde ya había otros hijos y su nombre verdadero fue Francesco Forgione.

Desde pequeño prefería ir a la iglesia a orar en la mañana y tarde a Jesús Sacramentado y a la Virgen María, en vez de jugar como otros niños de su edad, a lo que alegaba  a su madre que no compartía con ellos  porque blasfemaban.

El máximo regalo le llegó a los 16 años, cuando pudo ingresar felizmente al convento, como fraile Capuchino y así iniciar sus estudios religiosos que concluyeron con su ordenación sacerdotal, el 10 de Agosto de 1910 en la Catedral de Benevento. Francisco le confiaría a su director espiritual, que a partir de los 5 años había  y experimentado éxtasis y visiones que por ser desconocidas para él, las consideró normales.

A partir de entonces se inicia como sacerdote en distintos conventos hasta el 4 de septiembre de 1916 cuando llegó al convento de San Giovanni Rotondo en Gángano, y allí permaneció hasta su sentida muerte ocurrida el 23 de septiembre de 1968.

Tanto en vida, como después de fallecido el Padre Pío fue un Santo, hasta donde llegaba la gente en busca salud, otros en agradecimiento por su conversión, en fin diversas eran las peticiones al Padre Pío quien se transportaba espiritualmente y realizaba y realiza curaciones. 

Hermosa historia para quienes le veneramos, pero, dura lucha la sostenida por él, sobre todo después de haber sido estigmatizado (20-09-1928) con las heridas de Jesús Crucificado: manos, costado y pies de donde emanaba sangre a partir de los días jueves. Inexplicable para la ciencia pero, creíble para los que creemos en JESUCRISTO.

Pidamos su intercesión ante las dificultades, Dios nos escucha y escuchará siempre.