GUSTAVO LE BON
GUSTAVO LE BON
LA ERA DE LAS MUCHEDUMBRES
El alma de las
muchedumbres:
-
Es, en
sentido ordinario, la palabra muchedumbre representa una reunión de individuos,
cualesquiera que sean, también los accidentes que los reúnan.
-
Desde el punto de vista sicológico, la expresión
muchedumbre toma otra significación muy distinta. En ciertas circunstancias
dadas, y solamente en estas circunstancias: es una aglomeración de
hombres y posee caracteres nuevos muy diferentes de los individuos que
componen esta aglomeración.
La personalidad
consciente se desvanece, los sentimientos y las ideas de todas las unidades son
orientados en una misma dirección. Se forma un alma colectiva, transitoria, sin
duda, que presenta caracteres muy puros. La colectividad entonces se convierte
en lo que, pudiéramos llamar – una muchedumbre organizada-o una muchedumbre
sicológica. Así, forma un solo ser, y se encuentra sometida a
la ley de la sanidad mental de las muchedumbres.
Las muchedumbres sicológicas, son susceptibles
de una clasificación; y cuando lleguemos a ocuparnos de ésta, veremos que una
multitud heterogénea, es decir, compuesta de elementos desemejantes, presenta
en las muchedumbres homogéneas (sectas, castas y clases), caracteres
comunes, y, al lado de estos caracteres comunes, particularidades que permiten
su diferenciación.
La constitución mental de las muchedumbres:
conocemos sus maneras de sentir, de pensar, de razonar cómo nacen y se
establecen sus opiniones y sus creencias? Los factores que la determinan son de
dos órdenes: los factores lejanos y los inmediatos.
- Los lejanos son los que hacen capaces a las muchedumbres de adoptar ciertas convicciones y absolutamente inaptas para dejarse influir por otras.
- Los factores inmediatos son los que, sobreponiéndose a ese dilatado trabajo, sin el cual no hubieran tenido efecto, provocan la persuasión activa en las muchedumbres; es decir, hacen tomar forma a la idea y la desarrollan con todas sus consecuencias.
- Por estos factores inmediatos, se producen las revoluciones que soliviantan bruscamente a las colectividades; por ellos, estalla una revolución o se decide una huelga; por ellos, mayoría enormes elevan a un hombre al Poder o hacen caer un Gobierno.
Fuente:
Psicología de las multitudes/Gustavo Le Bon. Editorial Albatros, Buenos Aires.
Comentarios
Publicar un comentario